martes, enero 10, 2006

Año nuevo

Año nuevo, latidos en mi corazón, alguien silba en la distancia y un par de ángeles murmuran en lo quieto de la obscuridad. El teléfono que solía llamar ha dejado de sonar por completo. Nadie puede encontrarme ahora, estoy conmigo y con nadie más. No hay nombre de calle, ni teléfono a donde llamar, mis alas de plata se preparan para el viaje. Oficialmente incomunicada con afuera me encuentro, totalmente comunicada con adentro estoy. Silencio en la habitación. Una ventana abierta.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Espero que en este año nuevo, te des cuenta que tu ángel de los sueños ya es conocido.... y que esas alas de plata te hagan viajar a conocer el mejor sueño